por Cris Antemo 26-08-23
Pasó el primer turno electoral, ganadores y perdedores fueron analizados en múltiples columnas, y sólo resta esperar a Octubre. Pero, como es habitual, las elecciones actúan como una especie de bisagra en hechos y comportamientos, sobre todo en muchos sectores del poder. Esto es, actuar de una forma mientras buscan el voto, y volver a ser lo que en verdad son, luego de obtener lo buscado.
Pero las voces son muchas, y los pasillos oyen. Veamos:
No sólo de fotos al lado del asfalto o entregando cheques a los clubes se construye la campaña. Es más, todos los partidos, oficialismos y oposiciones, con mayores o menores recursos, recurrieron a esa vieja herramienta. Pero hay un sector que, para la oposición, resulta muy difícil de atraer, simplemente por no tener nada para ofrecer, y menos alguna idea que beneficie al sector: Los empleados municipales.
Es ahí donde, tal vez un poco ingenuamente, el oficialismo cree tener algo de ventaja. Contrataciones de última hora, bonificaciones casi al cierre de la campaña, recategorizaciones sólo a un par de días del acto electoral. Esas, y seguramente algunas otras, fueron las poco sutiles herramientas usadas por el gobierno de turno para seducir a un poco simpatizante plantel municipal.
Resulta imposible medir el nivel de adhesión que pudiera haber tenido el oficialismo por parte de los empleados. Eso si, pasadas las elecciones, y como si todo pudiera remediarse cuando se acerque Octubre, pocos días después de adjudicarse las PASO todo volvió a la "normalidad": Aprietes, maltratos, despidos encubiertos detrás de sumarios hechos a medida del funcionario solicitante, y hasta, como oímos esta semana en una emisora local, amenazas por parte de Directores que, hasta hace poco tiempo atrás, ni siquiera sabían donde quedaba Pringles.
Como decíamos antes, y en un ciclo casi interminable, seguramente cuando se acerque Octubre, quienes así actúan hoy, volverán a buscar la forma de hacer olvidar a los empleados tantos malos momentos, a través de discursos grandilocuentes y beneficios casi irrisorios. Sería saludable leer u oír alguna declaración conjunta de los Sindicatos municipales, rechazando ese tipo de maniobras, y ratificando la defensa de los empleados. Estará por verse.
Parece que este pacífico lugar en el que nacimos no está exento de la realidad nacional, y eso se nota en algún que otro tema fundamental, la seguridad, por ejemplo.
Al aumento de los robos, pequeños o no, en domicilios, se les han ido sumando hechos que no acostumbrábamos a conocer: Arrebatos, golpizas en grupo a chicos para robarles celulares o algún otro objeto, robos con rotura de cristales a comercios, grupos en plazas o calles que intimidan y provocan a quien se arriesgue a pasar cerca de ellos, etc. .
No seré yo uno más de aquellos que hablan, siempre en demasía, insinuando tener recetas infalibles para terminar con estas situaciones. Sino, veamos:
Llama la atención la concurrencia casi semanal del comisario local a un programa radial, cuya conductora se limita a sentar a su entrevistado y soltarle "sermones" de varios minutos de duración, repartiendo instrucciones acerca de lo que habría que hacer con los menores que delinquen, apuntando, obviamente, a la más elemental y torpe "mano dura". Pocas veces se la oye abordar los temas que son disparadores de las actitudes que llevan a esos menores a cometer esos hechos. Se sabe, la palabra "empatía" es despreciada por la conocida comunicadora.
En algún momento, incluso, los partes policiales, debido a su exigencia, incluían completos datos de los infractores o detenidos, situación que fue variando (seguramente por motivos legales), hasta lo que ocurre hoy en día, en que los comunicados policiales casi no entregan dato alguno y, por ejemplo, las alcoholemias positivas son sólo eso...números que supuestamente arroja el alcoholímetro..
Y qué se hace por este tema a nivel político?. Sólo sabemos que existe un Secretario de Seguridad que, como única y notoria habilidad, gusta de iniciar grandes parrafadas, capaz de hablar durante varios minutos, sea en una nota, o ante cualquier persona...sin decir absolutamente nada. Lo extraño es que ese dudoso mérito es tomado por muchos como una de sus variadas virtudes, pero afortunadamente, se percibe que la mayoría, incluso aquellos que lo conceptuaban como un gran funcionario....comienzan a darse cuenta.
Otro de los "caídos del cielo", que supo integrar otros gabinetes, no sólo aquí, sino en la zona, pudiéndoselo describir como una especie de "mercenario de la administración pública", que, al igual que otros, poco y nada sabían de este pueblo hace sólo algunos años atrás.
También se ha sabido que no sólo "renta" sus servicios como funcionario, sino también como puntero político, ya que, luego de haber sido dirigente del desaparecido "Entre Todos" del ex-Intendente Oreste, se lo pudo ver en las PASO actuando como fiscal general de Juntos por Pringles.
Soberbia, gritos y maltrato es sólo un pequeño panorama que trazan los empleados municipales que cuentan cómo es trabajar con ese "señor"?.
No crea, lector, que olvidé que estos párrafos abordaban el tema seguridad en nuestra ciudad. Ocurre que el funcionario mencionado ha demostrado tal desconocimiento del tema, que poco hay para agregar. Si tenemos en cuenta que implementar el programa "Ojos en Alerta", que no es otra cosa que pedirle a la gente que haga el trabajo de las fuerzas de seguridad, ha sido presentado como un logro extraordinario (tan extraordinario como armar un grupo de whatsapp con muchos miembros), está todo dicho. Esas orejas en el pasillo, han oído que, a la vuelta de las merecidas vacaciones del mandatario, podría haber novedades acerca de la continuidad en su cargo del funcionario de alquiler (bastante caro, por cierto). Veremos.
Hasta la próxima, atentos y sonrientes.